María con olor a flores

María con olor a flores

   Quiero volar con este maldito viento y escapar un ratito hasta dónde estás tú, tomar tu mano, besarte, abrazarte y dormir junto a ti. Quiero llegar al cielo y permitirme devastar a Dios, hacerlo llegar tres metros bajo el suelo (já) y a ti llevarte miles de millones sobre el universo.

   Se bien que la inspiración me llevó a crearte a ti, por mi, por mi soledad y mi apatía cotidiana contra la humanidad, junto también a las miles de dudas que en mi dejaste revolotear, sin embargo, te sigo bien, voy atado al viento, flotando junto al mar, peleando y gritando sin cantar, te sigo a ti, aferrado a tu farsante alma, sin detenerme y sin dar paso atrás, pero cada vez, mi alma llora mucho más al ver que no estás, día a día, botando mi satisfacción sobre los desechos de un corazón roto.

   Me siento perdido al olvidar mi cruel destino, al no verte en él y no conocer la verdad de mi camino, por eso mi Dios, hoy te pido que me guardes esa gloria ofrecida y dejes seguir mi destierro en esta tierra del sol florido, que no hace caso a tus gritos, que no hace caso a los míos.