Y rompiste mi corazón, más de lo que cualquiera pudo haber hecho.

Y rompiste mi corazón, más de lo que cualquiera pudo haber hecho

      Es fácil preguntar cuánto me la jugaría por tu amor. Es fácil preguntar qué estoy dispuesto a arriesgar por tu corazón. Es fácil preguntar qué puedo cambiar de mi vida por ti, por tu sonrisa y tu mirada.

       Para ti es fácil lograr que suelte todo lo que siento y luego decirme que también me amas. Para ti es fácil hacerme sentir tu corazón a través de una pantalla y luego romper mi propio corazón con un par de palabras. Para ti es fácil humillarme en cuestión de segundos. Para ti fue fácil romper mi corazón, más de lo que cualquiera pudo haber hecho.

       Charlabamos como si nada, tú hablabas como si estuvieras jugando con tu sonrisa y con tus palabras, escribes en el teclado, como si estuvieras mintiendo sin resguardos.

       Me das vuelta la tortilla como si nada, me despojas de mi amor propio, de mi ego por los cielos y me mandas a volar al infierno con tus palabras. Me haces creer que mis buenas palabras son ofensas y me haces creer que lo hecho por ti, jamás fue nada.

        De verdad, no lo entiendo. Cómo lo haces para romper mi corazón y aun así, seguir rompiéndolo. No sé cómo lo haces para hacerme sentir culpable de lo que jamás tuve la culpa y no sé cómo haces para que yo me siga humillando ante ti.

        De verdad, no lo entiendo. Cómo lo haces para que yo te pida disculpas, para que yo te hable, cuando tú deberías estar de rodillas, y no ante mi, porque ni eso mereces ahora que lo vengo a pensar.

        De verdad, no sé cómo lo haces para que mis letras aun vayan dirigidas hacia ti, esperando a que las leas. No sé cómo lo hiciste, pero me humillaste y rompiste mi corazón, más de lo que cualquiera pudo haber hecho.