Amo
Vivir, es una experiencia sin control, límites ni discos pares; y sentir, es un placer sin comparación.
Amo un día nublado, alejándonos de ese calor insoportable de un sol que desearía eliminar, que desearía poder tapar con un dedo y borrar con un lápiz corrector. Amo esa brisa fría y recogedora, malvada y, sin embargo, amante de mi cuerpo completo, pues también amo sentirla recorrer mis brazos descubiertos, erizando mi piel y causándome exquisitos e incomparables escalofríos. Amo ese frío mañanero, capaz de hacerme despertar con ánimos de ir a la universidad y que a su vez es capaz de hacerme dormir profundamente bajo la protección de mi cama, en mi habitación y en lo posible en tus brazos, pues ellos son la mejor forma de cubrirlo todo. Amo el frío, su capacidad de unir a la gente y hacer que no se sienta frío y su impertinencia irresponsable ante situaciones en que se le amerita.
Amo cuando cae la lluvia de ese día nublado, cuando moja hasta el más ínfimo y recóndito lugar de nuestros cuerpos, pidiéndonos a gritos que salgamos corriendo tomados de la mano, gritando y jugando, amándonos. Amo más a esa lluvia sorpresiva, la que llega en un día con sol inmenso y amable -tal vez agobiante-, pues me libera de mis ataduras y me encuentra con ropa ligera, desgarrando los placeres carnales a su máximo esplendor.
Amo esas nubes, que acompañadas del fuerte viento y de la fuerte lluvia cayendo sobre mi techo, pues me invita a recordar mi infancia, junto a mi padre, mi hermano y mi hermana, tomados de la mano en el campo, bajo esas mismas circunstancias, llegando a una cabaña, empapados hasta las patas, con mi madre en ella y esperándonos con ricas sopaipillas.
1 comentario:
Bailando bajo la lluvia!! jeje
también me encanta caminar bajo la lluvia, excepto cuando me coje de camino para la U :/
Besos***
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